Una historia como las demás...

Ésta es una historia como tantas otras ya fueron contadas antes. Sucedió en mi ciudad natal, al menos ahí empezó todo.
Estaba sentada frente al pizarrón, como solía hacerlo todos los días, mandándome notitas con Julieta, una chica delirante y bastante divertida. A mi lado pasó Daniel, el chico callado del curso, acompañado del profesor, un hombre de no mucha edad, q enseñaba biología. No entendía porque, pero últimamente el profesor y Daniel habían estado pasando mucho tiempo juntos. El profesor se paró apoyando ambas manos sobre mi banco.
-¿La molesto señorita Coppolla? -Me dijo quitándome el papel que acababa de recibir de July.
-Lo siento profesor.
-No lo sientas, tan sólo decime qué son los Orthomyxoviridae.
-Lo siento, no lo sé... -Me sentía completa y absolútamente humillada.
-Es la familia de virus de ARN que pueden producir la gripe común. -Contestó Daniel.
-Gracias por el dato señorita Coppolla. -Soltó el profesor, produciendo una risa general en el aula. Daniel desde el fondo me sonrió.
Luego de unas cuantas horas aburridas de clase, por fin llegó la hora de irme a mi casa a almorzar. Tomé la mochila y empecé a caminar hacia la parada de omnibus. Media hora más tarde estaba llegando a mi casa, a trece kilómetros del centro, cuando oí un ruido atrás mío. Lo que era raro, porque la calle estaba desierta y no solía haber nunca nadie a esta hora. Me di vuelta muy lentamente para descubrir a un hombre de unos treinta y tantos, empuñando un cuchillo.
-Hola hermosa, creo que hoy es tu día de suerte...